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El asunto es así: en un mundo donde se presta y se adeuda dinero, es posible que alguien no pague sus obligaciones. ¿Cuál es el riesgo crediticio de tu empresa? ¿Sabrías cómo actuar en caso de que un cliente no cancele las deudas adquiridas con tu negocio o deje de pagar por los servicios que le prestaste?
El riesgo de crédito es una preocupación en todo aquel que presta un servicio o vende un producto y espera recibir un pago por ello. Se refiere a la posibilidad de que una persona o empresa incumpla sus obligaciones financieras, lo que puede resultar en pérdidas para quien presta el servicio y no recibe el dinero. Por lo tanto, el riesgo de crédito es un aspecto clave en la toma de decisiones financieras.
Es de uso ya extendido en el sector B2B (entre empresas) que las transacciones se realicen a crédito, es decir, se presta el servicio y se paga después. Piensa, por ejemplo, en cómo cancela tu empresa los servicios que te prestan los diferentes proveedores.
Es por eso que conocer los diferentes tipos de riesgo de crédito, y saber cómo evaluarlos y controlarlos, es esencial para tomar decisiones informadas y proteger los activos financieros de tu negocio. La gestión efectiva del riesgo de crédito es fundamental para lograr una cartera sólida y rentable a largo plazo.
¿Qué es el riesgo de crédito?
Como ya lo hemos mencionado, el riesgo de crédito o riesgo crediticio es la posibilidad de que las facturas que emitas queden sin pago, es decir, que acumules deudas impagas, lo que afecta tu flujo de caja y el presupuesto de tu negocio, poniendo en riesgo la estabilidad financiera de tu negocio o, incluso, su supervivencia.
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Tipos de riesgo crediticio
El riesgo de liquidez o de impago
Se refiere a la capacidad de una empresa para cumplir con sus obligaciones a tiempo, incluso si la situación financiera cambia. Es importante que identifiques si hay problemas de liquidez en tus clientes y que puedas pensar en estrategias para que no se vea desfinanciado tu negocio.
El riesgo de exposición
Este habla sobre la incertidumbre sobre los futuros pagos de las facturas que se deben. Es importante entender la actitud de tus clientes o deudores, así como las diferentes variables del mercado.
Los riesgos financieros
Incluyen la falta de acceso a financiamiento, los costos de financiamiento más altos y la incertidumbre en los mercados financieros. Debes estar atento a estas variables que pueden repercutir en tu propio negocio.
Riesgo de concentración
Ocurre cuando gran parte de tu cartera depende de un solo cliente, o sea, los ingresos de tu empresa vienen de muy pocos clientes o de uno solo incluso. ¿Qué ocurriría si este deja de pagarte por los servicios que le prestas o los bienes que le vendes?
Riesgo de crédito individual
Este habla de la situación financiera y el historial de crédito de una persona o empresa específica. Quien ha incumplido sus obligaciones financieras en el pasado probablemente represente un riesgo de crédito más alto que una empresa con un historial de cumplimiento.
Hay otro nivel de riesgo crediticio que no se debe pasar por alto.
Riesgo de crédito sectorial
Este tipo de riesgo se refiere a las condiciones económicas de un sector específico, como la industria manufacturera o la construcción. Si el sector sufre una recesión, es posible que muchas empresas incumplan sus obligaciones financieras.
Riesgo país
Se refiere a la situación económica y política de un país. Una guerra o una crisis política pueden afectar negativamente la economía de un país y, por lo tanto, aumentar el riesgo de impago de las empresas que operan allí.
¿Cómo calcular el riesgo crediticio de la empresa?

Calcular el riesgo de crédito de una empresa puede ser un proceso complicado que requiere evaluar varios factores, incluyendo la solvencia financiera y la calidad de los ingresos de tu cliente.
Sin embargo, entendemos que eso no es posible siempre. Lo que sí puedes hacer es llevar un control sobre los pagos que recibes de cada uno de tus clientes y crear estrategias de cobranza que permitan adelantarte a posibles problemas que pongan en riesgo tus finanzas.
Recuerda que una buena gestión del riesgo de crédito puede ayudar a mitigar los posibles problemas ocasionados por la falta de pago. Algunas de las medidas que se pueden tomar para mitigar el riesgo de crédito incluyen la implementación de controles y procesos de seguimiento para monitorear la situación financiera de las empresas con las que trabajas.
Así, si tienes una herramienta que te brinde datos para analizar el comportamiento de pago de tus clientes, con la que puedas crear mensajes personalizados para recordar el pago de tus facturas o cómo gestionar tu estrategia de pronto pago, podrías estar protegiendo la estabilidad y continuidad de tu negocio.
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